Hardy O. Chávez V.
Abril 2020
Si bien en este tiempo de crisis la herramienta de gestión estrella es el flujo de caja, no se debe olvidar la forma adecuada de mirar el estado de resultado. En tiempos de normalidad, las empresas, dependiendo de su tamaño y de su nivel de profesionalización, el área de administración y finanzas entrega información para la toma de decisiones, que es muy variable en su frecuencia y calidad.
Dicha variabilidad, para el estado de resultados, parte de simples planillas de ingresos y gastos en Excel a informes por líneas de negocios y/o informes clasificados en IFRS. Dentro de dicho rango, está la presentación del estado de resultados en partidas que separan los costos variables de los fijos, es decir:
+ Ingresos (I)
- Costos Variables (CV)
= Margen
- Costos Fijos (CF)
= Resultado Antes de Impuestos (R)
Así como el flujo de caja ayuda a estimar el déficit de caja y en consecuencia dimensionar el monto de financiamiento a requerir, un estado de resultado ayudará a definir con qué resultado se podría terminar este año. Dicho resultado, dependerá del nivel de actividad que se esté proyectando.
Dada la contingencia actual, un resultado deseado para este año podría ser no tener utilidades, lo que implicaría tener Ingresos iguales a la suma de los Costos Fijos más los Costos Variables, es decir, tener el nivel de actividad del punto de equilibrio.
Entonces, si los Costos Variables sobre los Ingresos es B, el ingreso de equilibrio (Ie) viene dado por:
Ie = CF + CV
Ie = CF + Ie x B
Despejando:
Ie = CF / (1 – B)
Una estrategia para enfrentar este año, en un plan de retorno, podría ser que el o los dueños estén dispuestos a tener una pérdida o simplemente no tener utilidades. De ser así, es fundamental que la administración:
1.- Identifique los costos fijos y variables.
2.- Evalúe qué costos fijos se deben mantener, rebajar, suspender transitoriamente y eliminar.
3.- Estime cuál es porcentaje de costos variables sobre los ingresos.
4.- Estime el Ingreso de equilibro y que dicho ingreso sea una meta comercial.
5.- Mientras exista capacidad ociosa, estime el precio de venta al menos como el costo variable + 1, pues lo más probable, dada la contingencia, en muchos sectores la estrategia de venta será la de bajar precios.
6.- Una vez definido el estado de resultado, estime el flujo de caja y nivel de financiamiento requerido utilizando la línea Fogape, que en términos generales consiste en que los bancos podrán ofrecer créditos hasta por un monto equivalente a tres meses de ventas promedio a una tasa anual del 3,5%.
Según el nivel de ventas anuales de la empresa, el monto máximo del financiamiento Fogape y porcentaje de garantía estatal son:
a.- Ventas menores a 25.000 UF, crédito máximo 6.250 UF y garantía estatal 85%
b.- Ventas mayores a 25.000 UF y menores a 100.000 UF, crédito máximo 25.000 UF y garantía estatal 80%
c.- Ventas mayores a 100.000 UF y menores a 600.000 UF, crédito máximo 150.000 UF y garantía estatal 70%
d.- Ventas mayores a 600.000 UF y menores a 1.000.000 UF, crédito máximo 250.000 UF y garantía estatal del 60%